Hace un tiempo, Yasser Arafat fue llamado de urgencia a conducir la lucha en otro frente: Abu Ammar partió y vio con agrado cómo sin armas allá arriba, ¡sin piedras siquiera!, las almas palestinas tiran fragmentos de nubes al agresor porque los muertos israelíes no las dejan descansar en el Cielo de su pueblo.
UFFFF!!!!! genial, ya, no puedo decir más, se me esfuman las palabras
ResponderEliminarNo importa, Melissa, si un día se esfuman tus palabras, siempre que quedes tú ahí, cerca de estas letras. Gracias.
ResponderEliminarEnrique, tus palabras traen inspiración siempre. Y coincido con Melissa con lo de GENIAL, aunque ya me parece corto el adjetivo. Creo que nuestros hijos estudiarán tu obra cuando vayan a la escuela. Qué bueno que les podremos decir que ese mago-escritor es un buen amigo de sus padres. Un abrazo capitalino y vueltabajero. Anays
ResponderEliminarAnays: Como dice a veces mi niño Daniel: No hay que exagerar. Pero no te niego cuánto me place que te tomes el tiempo de leer estas notas. Están escritas para personas como tú: sensibles, pacíficas, amorosas. Ese es el espíritu de mi blog, y hasta ahora mis amigos me ayudan a sostenerlo. De lo otro que dices: según "pintan" las cosas, creo que tus hijos tendrán muchas otras estampas buenas para estudiar. Dos abrazos. Gracias.
ResponderEliminarVerdad que se queda uno sin palabras!!!!!!!!!!!!! Un besito
ResponderEliminarUn beso con gracias para ti, Yaima, por alimentar mutuo aprecio desde la distancia.
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