jueves, 26 de abril de 2012

La Bolsa y la vida

A Iraq le rompieron el cielo en mil pedazos. Será costoso repararlo con lo caros que están los cielos en el mercado. La tierra, dicen, quedó llena de parches, pero eso tiene solución. Más que el cielo y la tierra, valen tantas vidas segadas. El mercado nunca podrá reponerlas.

miércoles, 25 de abril de 2012

Muerte de academia

Pocos dudan de que, en realidad, los drones sean inteligentes. Certera puntería para matar al paquistaní preciso, para hacer trizas cualquier blanco que no sea blanco, asombrosa efectividad sobre la carne diferente y la piedra que protege al humano equivocado. Miren bien, compradores: no todas las armas saben distinguir las almas a matar. Muy sabio este Don Dron que lleva en sus cuchillos todos los títulos de Obama.

jueves, 19 de abril de 2012

¡Completo Camagüey!

Puede que el mío sea un humor esquimal, pero siempre me han dado mucha gracia los coterráneos que se van a La Habana para en seguida inscribirse en algo así como un movimiento de camagüeyanos en la capital.

El asunto tiene su pompa, según se oye desde acá, y en pleno Parque Agramonte uno hasta se acompleja de no ser tan camagüeyano como aquellos que decidieron arrostrarlo todo con tal de instalarse 500 kilómetros al Oeste.

Porque los comprovincianos ausentes tienen una especie de tácito decálogo de la camagüeyaneidad (sí, ya sé que el término se las trae, pero recuerden que los académicos tienen que vivir) capaz de medir en milígramos y amperes, en arrobas y nudos, en mazos y jarritos, qué tan pura sangre es cada uno a ese respecto.

Yo trabajo a una cuadra de donde nació El Mayor, muy cerca de las casas natales de Nicolás Guillén, Carlos J.Finlay, La Avellaneda, Enrique José Varona y Aurelia Castillo, pero ese barrio de ilustres no alcanza a autentificarme. 

Todavía, si me arriesgo, puedo tomar agua de tinajón y salir ileso de ese lance. Y de entre la maleza auditiva de los reguetones aun puedo sacar en los diálogos de esta comarca expresiones francamente cervantinas, sin embargo no es suficiente. No califico.

No tengo la menor idea de en qué sitio se sentirá plenamente realizado un habanero, pero estoy convencido de que quien quiera ser un camagüeyano completo tiene que irse a La Habana, a todas luces el mejor lugar del mundo para sentirse camagüeyano.

Los hipercamagüeyanos vienen como turistas intranjeros en fechas gloriosas o durante sus vacaciones y con aval de otra parte se agencian los mayores reconocimientos de esta tierra que tanto les agradece su curso de camagüeyaneidad por encuentros.

Así se ha ido formando frente al Morro una legión tan grande de camagüeyanos que no estoy seguro quepa en su provincia de origen, la más grande de Cuba, sea dicho de paso. No quiero pensar qué ocurrirá cuando la vieja Santa María del Puerto del Príncipe cumpla sus 500 años en febrero del 2014. Parafraseando a Formell: ¡no hay vaca pa’ tanta gente!

Nadie tome a mal esta estampa sociológica. Les soy sincero: también yo tengo mi corazoncito; a cada rato me levanto con tremendas ganas de hacerme camagüeyano, pero señores, La Habana queda muy lejos y el transporte está difícil. 

miércoles, 18 de abril de 2012

Comando operativo

Mis héroes no son tipos muy afortunados que digamos. No son de la clase del chico que al final termina besando a la chica más jugosa. Los músculos no les van y sus destrezas son más cerebrales que físicas.

Mas no los cambio: me quedo con el Martí angustiado que en su lección más alta dijo un día: “Sé desaparecer”… y desaparecido sigue apareciendo. Me quedo con El Quijote, hidalgo cascarrabias tan repetido ahora por los mismos molinos que enfrentara.

Quiero conmigo a Rulfo, fatal farandulero, un escritor amargo, sin “onda”, sin poses, sin camas múltiples y casi hasta sin libros. Me llevo en mis afectos al Ghandi que me lleva, ni una piedra en su mano, ni llena la barriga ni el corazón contento.   

Admiro sin cesares a Van Gogh, el gran cuerdo holandés que aseguró que en este ingrato mundo nunca nos falten girasoles. Me quedo con Mandela, tan negro en un país que pretendió blanquearlo en negra celda.

Otros héroes mayúsculos son para mí el hombre que murió no se sabe cómo y está enterrado nadie sabe dónde, sin más flor que una gota emigrada de una nube; el padre anónimo que sabe besar a su hijo macho y camino a sus canas no olvida la receta de cómo se cocina lágrima en cazuela, y el maestro que solo aspira a ser una letra pequeña en el abecedario loco de cualquier muchachada.

Esos son algunos; hay más. Mis héroes se conocen entre sí y a menudo se sientan a una mesa a decidir calladamente cómo seguir salvando el mundo, aunque muy pocos lo agradezcan.

martes, 17 de abril de 2012

Machismo

Nunca antes habían reparado en su estatura. Rebasados en toda la línea por aquella intrusa descomunal, un día reunieron todo su capital en diamantes y pagaron una página en el New York Times:

—Permutamos una Blanca Nieves grande por siete granizas pequeñas - clamaban los enanitos.                   

lunes, 16 de abril de 2012

El elefante ha muerto… ¡que viva el Rey!

Siempre me he jactado de mis saberes: poseo una ignorancia enciclopédica. Cualquiera se asombraría de las cosas que ignoro. Mi incultura abarca infinitos ámbitos, al punto de que tengo cosas que callar sobre todos los temas.

Desde niño, una de mis zonas oscuras ha sido esta: ¿qué cosa hace un rey en estos tiempos, fuera de los libros de Historia y los filmes de aventuras? Nadie me aclaraba el asunto, sin embargo creo haber hallado la respuesta, muy lejos de aquí, en la cuna de nuestra especie: África.

Me la ha dado Don Juan Carlos —monarca español y Presidente de Honor de la World Wildlife Fund en su país—, quien se ha fracturado la cadera mientras mataba elefantes en Bostwana, hobby que allí cuesta unos 40 000 euros por pieza.

Mi incultura ha decrecido un tantico, es verdad. Ahora sé que un rey sirve para cazar en tierras ajenas a cambio de nuevas cuentas brillantes y espejitos postmodernos, pero no se vayan a entusiasmar con este descubrimiento; mi ignorancia es más grande todavía: ya me estoy preguntando quién les colocará prótesis a las vidas salvajes quebradas con las distinguidas balas de la Casa Real.

domingo, 15 de abril de 2012

Gigantes

A la vista de los colosales astilleros Harland and Wolf donde en tres años construyeron la coraza y los músculos del Titanic, solo atino a imaginar el poderío de los fiordos de Groenlandia que, sin ninguna publicidad, formaron el iceberg que en tres años de viaje, por tierra y mar, llegó a tiempo para aquel duelo.

sábado, 14 de abril de 2012

¡Bravo!


Esa música que trae el mar, que corean las olas en melodioso susurro, que recogen los caracoles cual coloridos CDs, no es otra cosa que el eco de la orquesta del Titanic, el gigante más sensible que a cien años de iniciado su concierto no ha parado de tocar.

jueves, 12 de abril de 2012

Corduras

Lejos de pedir otras nuevas, en usufructo, Don Alonso Quijano vendió buena parte de sus tierras de labranza para comprar lo que más nos falta ahora: libros de caballería.

jueves, 5 de abril de 2012

Una chica muy sexy

Perdonen mis amigos esta ausencia tan larga. Me he perdido muchos días, y faltaré más. Es que, después de un tiempo, me esperó en casa una tarde y fue al grano. Ella es una muchacha más que absorbente que no acepta un No por respuesta.

Sus abrazos me desordenan y sus besos son pura electricidad. Apenas me deja pararme de la cama. Y yo tengo que hacer ese papel de hombre del que tanto hablaban los abuelos y tratar de seguirle el paso, aunque sea trastabillando.

Sé que entenderán por qué no puedo escribirles por ahora: estoy más que ocupado con una de mis novias de primera juventud, la irresistible Sacrolumbalgia.