Bendito romance, Mila mío, más si ha alumbrado un puente entre discordancias. Que el blanco y el negro se quieran siempre y se maticen el uno al otro de por vida. Beso de tu nube ahijada.
Ese es un romance muy criollo, María Antonieta. Ya lo "escribió" nuestro Guillén: aquí el que no tiene de ying, tiene de yang.
jajaja..qué bien!! somos mezcla de ying yang entonces???
Claro que lo somos Leydi. ¿Tú lo dudas? Los cubanos somos medio mulating, medio mulatang.
ajajajjaj... no faltaba más... algún día pasaría verdad????... me encantan esos finales, un beso
¿Cuáles finales te gustan, Melissa, los de estos post caimaneros o los de esos seres distantes que al fin terminan unidos?
En realidad los dos: los finales de tus post me fascinan y seres distantes que terminan unidos, uff!!! pues también.
Bendito romance, Mila mío, más si ha alumbrado un puente entre discordancias. Que el blanco y el negro se quieran siempre y se maticen el uno al otro de por vida. Beso de tu nube ahijada.
ResponderEliminarEse es un romance muy criollo, María Antonieta. Ya lo "escribió" nuestro Guillén: aquí el que no tiene de ying, tiene de yang.
ResponderEliminarjajaja..qué bien!! somos mezcla de ying yang entonces???
EliminarClaro que lo somos Leydi. ¿Tú lo dudas? Los cubanos somos medio mulating, medio mulatang.
ResponderEliminarajajajjaj... no faltaba más... algún día pasaría verdad????... me encantan esos finales, un beso
ResponderEliminar¿Cuáles finales te gustan, Melissa, los de estos post caimaneros o los de esos seres distantes que al fin terminan unidos?
ResponderEliminarEn realidad los dos: los finales de tus post me fascinan y seres distantes que terminan unidos, uff!!! pues también.
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